El doble o cuerpo astral

El doble, cuerpo de ensoñación o cuerpo astral es parte fundamental de nuestra anatomía energética. Es un cuerpo igual al físico, como una especie de holograma o copia energética del físico.

En los niños, la consciencia no está separada entre el cuerpo y el doble y forman una realidad unificada. Esto es lo que les da ese nivel de creatividad y espontaneidad tan característico.

Al crear nuestro ego como a los 6 años de edad, el doble es el que se queda con todo el contenido reprimido llegando a formar nuestra Sombra o parte oscura. Por eso es común que a esa edad los niños empiezan a tener pesadillas y a tenerle miedo a la oscuridad. La oscuridad es una proyección de nuestra propia sombra.

Entonces, un paso gigantesco en nuestro desarrollo y algo que siempre es bueno hacer, es integrarnos nuevamente con el doble. Hacernos conscientes de su existencia. Esto sucede en 3 niveles que pueden darse simultáneamente.

• Uno, recordar sueños con mayor detalle y empezar a entender y escuchar sus mensajes.
• Dos, tener sueños lúcidos, que son sueños donde nos damos cuenta que soñamos y podemos modificar elementos hasta inclusive transformar todo el sueño.
• Tres, teniendo los llamados viajes astrales o desdoblamientos o OBEs por sus siglas en inglés Out of Body Experiences.

Al integrarnos con el doble, dejamos de “pelearnos” con nosotros mismos, entre nuestra parte “buena” y “mala”, dejamos de auto-sabotearnos y de tener muchos de nuestros comportamientos tóxicos favoritos. Por lo menos los más evidentes o los más importantes.

Al integrarnos con el doble, recuperamos la espontaneidad, autenticidad, y creatividad de la infancia. Recuperamos una parte mágica de nuestra personalidad y esto nos da acceso a mucho más poder personal, mucha mas capacidad de gozo.

Otra cosa increíble que sucede al integrarlo, es que tenemos mucho mas fácil acceso a sus sentidos, a sus capacidades. Los sentidos del doble son 5 igual que los del físico, pero funcionan muy diferente. Son lo que llamamos psiquismo. Clarividencia, Clariaudiencia, Clariolfato, Claritacto y Clarigusto. Pero como el doble no funciona a nivel físico, sus sentidos son energéticos, entonces podemos ver, oír, oler, sentir y gustar objetos, personas, eventos, procesos lejanos en el espacio y en el tiempo.

Fabuloso, ¿no?

Las personas que consideramos psíquicas simplemente tienen mayor contacto innato con su cuerpo astral, y aprenden a desarrollar sus habilidades.

Algo muy importante que no debemos olvidar es que el desarrollo psíquico y la fusión o integración con el doble es nuestro destino; es nuestro siguiente paso evolutivo como humanidad.

Todas las tradiciones chamánicas del mundo reconocen la importancia y el gran beneficio del doble. Lo utilizan y manejan de formas increíbles.

Lo que vamos a hacer nosotros en la membresía es acercarnos al doble no a través del chamanismo en sí, sino a través de los sueños (que es la forma natural humana para comunicarnos con el doble). Pero también a través del qigong y las prácticas energéticas.

En toda la enseñanza disponible hoy día acerca de cómo manejar el doble, por lo menos las que yo conozco, no hay ninguna que entienda bien (a mi parecer) la relación tan estrecha que hay entre el cuerpo de qi y el cuerpo astral. Especialmente cómo el desarrollar el cuerpo de qi nos ayuda enormemente a conectar con el doble. Creo que esta es una de las grandes ventajas de Ontogonía. 

Esta semana vamos a enfocarnos más en los sueños lúcidos y en los viajes astrales, en qué son y cómo diferenciarlos, y también en cómo tenerlos.

Veremos también una secuencia de qigong para estimular al doble y la siguiente parte de la terapia autogénica, que como recordarán es una técnica que nos ayuda a mantener la consciencia cuando estamos quedando dormidos.

Recuerden que si nos mantenemos observando, podemos muy fácilmente reconocer cuando la consciencia pasa del físico al doble pues este proceso sucede de forma natural todas las noches en los ciclos del sueño.