Introducción al tantra
Si llegaste hasta aquí, ¡felicidades!
Este punto marca el final de la primera parte del curso de Desarrollo Integral del Ser.
Vamos a hacer Tantra, práctica tántrica, meditación tántrica. Vamos a aprender a usar el prana, el aliento, el cuerpo, la atención, las emociones y toda nuestra experiencia interna para desarrollarnos y despertar.
El intento en los meses siguientes es desarrollar Shakti o energía-poder y con su movimiento y estimulación despertar a Shiva, al observador, al ser interno.
Para poder hacer práctica tántrica correctamente necesitamos primero entender bien lo qué es y lo qué no es el tantra y quitar un poco de la confusión que se ha generado alrededor de este tema.
Tantra es un camino de liberación, una tecnología espiritual, un modelo a seguir, pero también fue toda una cultura en lo que hoy es India, Pakistan, Nepal y Tibet. Una cultura muy antigua, mucho más de lo que oficialmente conocemos en la historia acerca de la cultura Aria y los Vedas y todo eso.
La dificultad que tenemos como occidentales para entender tantra viene mucho de la consecuencia de que por milenios fue una tradición perseguida y ha permanecido secreta desde entonces. No hay diferenciadores externos como vestimenta, templos, regiones, incluso rituales externamente discernibles.
Tantra sobrevivió oculto a simple vista dentro de otras tradiciones espirituales y religiosas como:
- El yoga.
- El vedanta.
- El budismo tibetano.
- El arte, la música.
- La gastronomía india.
- La ayurveda.
- La astrología india, y más.
Tantra, esencialmente para nuestros fines es una tecnología interior, espiritual, de liberación, que nos lleva a desarrollar nuestras capacidades de consciencia, de amor, paso a paso y de una forma extremadamente específica y detallada.
Una de las nociones principales es que somos una fracción de un flujo eterno de expansión amorosa, y nuestro trabajo o misión, por decirlo de alguna manera, es recordar eso, retornar a ese flujo y desde ahí fungir como catalizadores para transformar la realidad a una expresión de mayor belleza, armonía, amor y libertad.
Este flujo eterno es el significado de palabra tantra en sí misma, que podemos traducir como “expansión sin límite”, “vehículo del flujo eterno”, “entramado expansivo”, entre otras.
La analogía esencial en tantra es que la realidad está compuesta por el equilibrio perfecto entre energía y consciencia, objeto y sujeto, lo observado y el observador. Estos dos aspectos nacen juntos y siempre se buscan, se anhelan, se desean. El objeto, lo observado es Shakti o el aspecto femenino y el sujeto u observador es Shiva o el aspecto masculino.
Shiva y Shakti existen en armonía total en los niveles iluminados o liberados de la realidad, pero conforme nos acercamos más al universo físico y material, el equilibrio natural entre estos va disminuyendo al incrementarse la energía, el poder, la materia: es decir, Shakti.
A nivel físico existe un extremo de energía, de Shakti en su máxima expresión, es decir, la mataría en sí, y en tantra se dice que Shiva va cediendo cada vez más hasta quedar totalmente “dormido” y cambia de Shiva a Shava o cadaver.
La meta del tantrika o practicante es despertar a Shiva nuevamente pero ahora desde esta realidad física y material.
Para lograrlo, debemos partir desde nuestra condición actual. Es por esto que hablamos de el despertar de la consciencia. Despertar de nuestro ser interno, nuestra consciencia iluminada o divina.
Esencialmente el proceso de despertar se ve en tantra como una maduración o transformación de nuestro cuerpo humano y sus capacidades y habilidades. Aquí hablamos de todas las capacidades fisiológicas como regeneración, descanso, memoria, inteligencia, pero también desarrollo neuronal, hormonal, emocional, psicológico, psíquico y de consciencia.
El enfoque en tantra es único ya que a diferencia de otras propuestas espirituales, utilizamos nuestros venenos como combustible para alcanzar estados iluminados. La energía de odio, ira, terror, tristeza, celos, envidia, etc. es utilizada como combustible o vehículo de la consciencia para llevarnos a espacios y estados de consciencia nuevos y más expandidos. En ese sentido es un enfoque muy terapéutico, catártico por así decirlo.
Lo que buscamos es poder vivir cada emoción y cada situación al 100%, plenamente desde el cuerpo, sin rechazar o negar o tensarnos de ninguna forma, sin aprender a permitir que cualquier experiencia nos suceda sin oponer ninguna resistencia pero estando 100% presentes.
Ese proceso paulatino de aprender a vivir todo al 100%, sin elegir nada, sin rechazar nada, sin tratar de controlar nada pero amando todo y reconociendo todo como sagrado, es la esencia del camino tántrico.
En tantra vemos a nuestro cuerpo como nuestro templo, como lo más sagrado y preciado que tenemos. Reconociendo el potencial de liberación desde el cuerpo, lo que buscamos es transformarlo poco a poco abriéndonos a nuevas posibilidades.
Esencialmente, en este templo que es el cuerpo físico y los cuerpos sutiles encontramos un mapa, al ser un reflejo de la perfección divina. Este mapa son nuestras mismas estructuras físicas y energéticas; nuestros cuerpo sutiles, comúnmente asociados con la palabra chakras pero son mucho más que eso.
La forma en la que vamos despertando se explica en tantra de forma hermosa: el aspecto crucial es abrirnos a una Gracia, a un poder divino que recibimos del universo, de la divinidad llamado Anugraha y Gurukripha entre otros. Cuando percibimos esta gracia, le llamamos Kundalini Shakti que significa “el Poder de aquella que está enroscada”.
Es una forma poética de hablar de una fuerza, una shakti, un poder interno que percibimos como habitando en nuestro vientre y ascendiendo por la columna vertebral. Cuando Kundalini asciende va nutriendo y madurando los chakras como un néctar lleno de nutrientes que hiciera crecer una planta con flores.
Este “crecimiento” y florecimiento de los chakras no es sólo algo abstracto o simbólico. Implica acceso a nuevos niveles de inteligencia superior, conocimiento y formas más maduras y elevadas de sentir y percibir, mayor compasión, generosidad, paciencia y toda una serie de virtudes. Sobre todo nos abre a nuevas posibilidades de sentir y vivir Amor.
Desarrollo Integral del Ser
Membresía Full-Access
Todos mis cursos online en un sólo lugar
Cursos | Encuentros | Comunidad