Llevar un diario de sueños

El problema con el que muchos de ustedes se van a encontrar cuando empiezan el camino de los sueños es que no recuerdan lo que soñaron.

Para empezar quiero decir que todos los mamíferos de placenta soñamos. No sólo los humanos. Deja que esta información te pegue por un instante. 

En segundo quiero decir que todos los humanos recordamos nuestros sueños de manera natural. El no recordarlos es una conducta aprendida, cultural. Es un hábito. Lo que quiere decir que se puede cambiar.

Para recordar sueños lo primero es reconocer lo importantes que son, pero creo que eso ya está establecido aquí.

Si no les damos importancia, nuestro ser simplemente no va a gastar energía en retener y recordar.

Ok, entonces es importante que nuestro sistema nervioso esté relajado. Si estamos en estado de estrés, agitación, tampoco vamos a recordar.

¿Por qué?

Porque al dormir tenemos dos tipos de experiencias normales: los sueños y el sueño profundo sin sueños.

El sueño profundo es la prioridad, pues es cuando el cuerpo físico se regenera, se sana, se auto-regula.

Sin sueño profundo es tan vital como beber y comer. Los efectos negativos de no dormir se notan tan pronto como 24 horas.

Para lograr sueño profundo necesitamos que nuestro sistema nervioso se relaje, es decir, no tener ansiedad, no tener asuntos pendientes al ir a la cama; estar tranquilos, en calma.

Esto es fundamental y es imprescindible.

A lo que voy es que si estás estresado, con problemas de cualquier tipo, con estrés, ni te preocupes por soñar.

Primero ocúpate de lograr relajar tu sistema nervioso para que tu salud no empeore.

Esto se puede lograr con una técnica súper simple pero no tan fácil.

Tienes que respirar como si ya estuvieras durmiendo profundamente: es decir: lento, suave, por la nariz e inflando y desinflando el vientre.

Este tipo de respiración profunda y diafragmática estimula el plexo solar relajando el sistema nervioso y activando el sistema parasimpático.

Puedes hacer esta práctica antes de dormir o a cualquier hora del día cuanto sientas estrés… entre más, mejor.

Le puedes agregar un elemento que le da un upgrade increíble: tu atención o presencia.

Si además de respirar profunda y lentamente traes toda tu presencia y observación, conviertes esta sencilla y humilde práctica en meditación profunda.

 Intenta esta práctica muchas veces, cuando quieras, donde sea. Es de las prácticas mas versátiles y poderosas.

Pero bueno, volvamos a los sueños.

¿cómo podemos hacer para recordar los sueños?

 Para mi, esto tiene tres partes importantes.

•  La primera es la forma en la que despertamos. La manera en la que transicionamos de dormir a estar despiertos.
• La segunda es la forma en la que recordamos, ya despiertos, lo que vivimos en la noche.
• Y la tercera es cómo expresamos o traducimos esa experiencia a lenguaje verbal.

 Entonces lo primero: cómo despertamos.

Trata de despertar despacio, sin prisa, sin saltar de la cama. Pon un despertador suave y date unos buenos 3 o 4 minutos para despertar, sin prisa.

 Obviamente lo ideal es no tener un horario fijo de despertar sino dejar que tu cuerpo despierte naturalmente y tener el celular en otra habitación que no sea tu recámara, pero esto no se puede para todos.

Al despertar, muévete despacio y lentamente. Trata de mantener tus ojos cerrados y permanecer lo más quieto posible.

Trata de permanecer relajado y permitir que el cuerpo “despierte” lentamente. Esto es que las sensaciones de entumecimiento y letargo vayan sucediendo. Que la sensación de pesadez mental o niebla mental se vaya disipando despacito, por si sola.

Poco a poco nos da ganas de movernos, de estirarnos, de bostezar, respirar hondo o vocalizar, trayendo oxígeno al cerebro y a los músculos. Esto es pasar del sistema parasimpático al simpático.

La clave es transicionar despacio. Como los niños, que se tardan un ratito en despertar y se quedan como mirando al espacio cuando están despertando.

Y es en este proceso donde hacemos la segunda parte importante. Deja que durante este proceso, tu memoria repase tus sueños. 

Sin esfuerzo, sin forzar, simplemente permite que tu consciencia observe lo que brote o surja.

Aquí es importante no analizar. No importa si no tiene sentido lógico, si sólo son fragmentos o incluso sensaciones. Tú permítelo y recuérdalo.

Y llegamos a la tercera parte. El traducir o expresar lo que soñaste. Para esto usamos el famoso diario de sueños.

Lo que queremos es escribir lo que nos llegue, sin filtrarlo o analizarlo.

Fragmentos, sensaciones, emociones, pensamientos. Es simplemente un registro, no un análisis. 

Una vez que hayas repasado o recordado tu experiencia de la noche, déjate escribirla en tus propias palabras. No te preocupes si no encuentras palabras elocuentes o exactas, eso no es lo importante.

Lo que quieres es simplemente traducir tu experiencia onírica en palabras. Las palabras que te vengan en el momento.

 Tampoco tienen que ser sueños completos, pueden ser fragmentos o incluso imágenes. No hay respuestas correctas o incorrectas, no es la escuela.

El diario de sueños con el tiempo va a ir tomando parte de tu energía psíquica, parte de tu ser.

Por eso es importante utilizar una libreta o cuaderno especialmente para este uso y no para otras cosas.

Si para ti tiene un valor especial la libreta, si es un regalo o si es una libreta hermosa o especial, aun mejor. Algunas personas utilizan un paño de seda o algodón para envolver su diario. Esto también es bueno.

Deja tu diario cerca de tu cama y procura que nadie lo lea ni lo toque, excepto tus hijos pequeños, ellos no importa.

Algo importante es la constancia. Es bueno escribir en el diario aunque no recuerdes nada. Escribe sensaciones, cómo te sientes ese día.. lo que quieres es hacer el proceso de recordar o de extraer información de adentro tuyo, de tu inconsciente. Poco a poco después de unos cuantos días verás como recuerdas mucho más.

Cabe mencionar aqui que es normal tener temporadas de semanas e incluso meses donde no hay tanta actividad onírica o donde no recordamos tanto. No te preocupes, tu continúa con tu práctica de escribir en el diario.

Hay muchas aplicaciones para el celular de sueños. Yo he probado muchas y honestamente ninguna me gusta. Siento que cuando agarro el celular ya es para trabajar o revisar mensajes etc, entonces todo el mood del despertar se pierde.

Además es hermoso poder regresar a los sueños y volverlos a leer. 

En el siguiente blog veremos un tipo de interpretación donde es util tener un registro de tus sueños pasados.

Y para finalizar, si te interesa el tema de los sueños, en mi página web tengo un curso donde te comparto información valiosa sobre los sueños, la astrología y el tarot. Haz click aquí para tener más información.

Nos vemos la próxima semana.