Shalom / Shanti

Esta práctica utiliza la palabra Paz para entrar en un estado meditativo, utilizando la respiración para dividirla en sus dos sílabas.

En sánscrito, paz se pronuncia SHANTI. En hebreo, SHALOM. Ambas tienen dos sílabas asi que las podemos utilizar de la misma forma.

Es una técnica realmente sencilla pero muy poderosa.

Respirando tranquilamente, suavmemente, por la nariz, utilizando mindfulness del aliento, respirando con el vientre, simplemente mentalizamos la sílaba SHA al inhalar y LOM al exhalar. O SHAN al inhalar y TI al exhalar.

Estamos creando un espacio de paz, de bienestar en nuestro interior utilizando la respiración, ¿si? Aplicando mindfulness al aliento pero al mismo tiempo intencionado con la palabra paz.

Lo interesante es que estamos utilizando sánscrito o hebreo, dos lenguas madres antiguas. La característica de los idiomas madres es que los sonidos que describen a cada cosa tienen la particularidad de que el campo de resonancia que generan es similar al campo de resonancia del objeto nombrado.

Esto es una gran diferencia con lenguas derivadas del latín o incluso del griego, que tienen una construcción lingüística y filosófica diferente, basada en la razón, en el estudio filosófico de la naturaleza de las cosas. No tanto en la percepción energética, vibracional como es el caso con las más antiguas.

Me encantaría hablarles ahora de todo esto, que es en esencia el por qué y el cómo los mantras funcionan pero no es el tema aquí.

Entonces al decir shalom o shanti, estamos produciendo una serie de sonidos cuya vibración en el aire, y cuyo campo electromagnético y también sutil obviamente, está produciendo el efecto similar al estado de paz en sí.

Otra cosa importante es que genera igual de poder si lo decimos en voz alta o en silencio. No hay diferencia para nuestra consciencia y para nuestro estado interno. La única excepción sería si quisiéramos generar un estado de paz para otra persona, en cuyo caso sí sería necesario decir en voz alta el sonido.

Entonces, inhalas pensando SHA, exhalas pensando LOM. O SHAN y TI. Te aconsejo que utilices una palabra en cada sesión, sin estarlas combinando.

Lo que va a suceder es que este espacio de paz te va a comenzar a llenar, a envolver. La paz misma que sientas se va a convertir en un estado de agradecimiento, pues la verdadera paz genera gratitud, y el estar en gratitud genera paz. Son como dos aspectos de lo mismo.

Puedes hacer esta práctica siempre. En cualquier momento, en cualquier situación. Entre más la hagas y más natural sea para ti, será más fácil que te encuentre haciéndola en momentos de estrés o tensión, incluso sin darte cuenta al principio.